Este artículo es una transcripción castellana del episodio "Entrenador Steven". Es el vigésimo episodio de la primera temporada.
Sinopsis[]
Después de ver a Granate y a Amatista fusionarse para convertirse en la poderosa Sugilita, Steven está decidido a volverse súper fuerte como esta.
Personajes[]
Personajes principales[]
Personajes menores[]
- Rosa Cuarzo (foto)
- Sardónice (mencionada indirectamente)
Transcripción[]
(La escena empieza con Steven y las Gemas teletransportándose al Centro de Comunicaciones de las Gemas)
Steven: (Mira asombrado el gran Centro de Comunicaciones de las Gemas) ¡Wooow! ¿Qué mágico lugar de misterios es este?
Amatista: Pues... (Amatista intenta explicarle a Steven, pero es interrumpida por Perla)
Perla: (Aplasta la cabeza de Amatista)¡Oh! Me alegra que preguntes. Esto era antes un centro de comunicación para las gemas, (Camina hacia los pilares del Centro de Comunicaciones) pero hace poco comenzó a transmitir ráfagas de interferencias electromagnéticas.
Steven: ¿Y eso qué significa?
Granate: Que no se ve la tele.
Steven: ¡Nooooo! ¡Te salvaré, televisión! (Patea con fuerza una de los pilares y luego lo comienza a empujar, sin lograr afectarlo)
Amatista: (Agarra a Steven y lo levanta) Lo siento, pero necesitamos a un Steven... (Luego se transforma en Steven, pero mucho más musculoso. Utiliza una voz más grave) ¡Más cachas para esto!
Steven: (Sorprendido) ¡Jah! Yo seré así algún día.
(Amatista baja a Steven. Demuestra sus músculos, y empieza a golpear el pilar)
(Perla agarra una pequeña pieza del pilar golpeado por Amatista)
Perla: Amatista, (Amatista vuelve a su forma original) nos podemos tirar aquí toda la tarde derribando pilares uno a uno. (Señala los pilares)
Amatista: (Molesta) Ahg, odio cuando tiene razón. Se te pone esa carita insoportable. (Voltea a ver a Perla y ella tiene la expresión dicha por Amatista) Sí, esa misma.
Perla: Necesitamos pensar un buen plan- (Su gema comienza a iluminarse para proyectar un holograma)
(Granate Interrumpe)
Granate: No. Lo que necesitamos es Sugilita. Amatista, fusionémonos.
Amatista y Perla: (Sorprendidas) ¿¡QUÉÉÉ!?
(Amatista comienza a gritar emocionada, y Perla la mira confundida. Luego, Perla la observa molesta)
Amatista: (Emocionada) (Se ríe. Luego sostiene la mano de Granate mientras salta de la felicidad) ¡Síííí! ¡Fusión a tope! (Amatista se coloca ambas manos en la cabeza. Steven voltea a ver a Amatista y Garnet gira su cabeza, seriamente) ¡Más grande! (Empieza a girar) ¡Más Mala!, ¡Más mejor! (Se detiene, agachándose un poco y abraza su cabeza. Vuelve a reírse)
Steven: (Se sorprende) Parad el carro. Ah... ¡Estáis diciendo que vais a fusionar vuestras gemas!
(Amatista le responde emocionada a Steven con un grito. Luego Steven y Amatista comienzan a gritar emocionados)
Perla: (Interrumpe los gritos de Steven y Amatista, enojada) ¡Espera! (Mira a Granate y corrige su postura) Uhm. Granate. Piénsalo bien, tú y Amatista pueden ser un pelín... Inestables, cuando vuestras personalidades se unan. Debemos ser cuidadosas, fusiónate conmigo.
Granate: (Coloca su mano en el hombro de Perla) No necesitamos ser cuidadosas, necesitamos ser gigantes. (Empieza a caminar, para colocarse en su posición)
Amatista: ¡Oh, sí! ¡Petemos este garito! (Corre detrás de Granate para colocarse en su posición. Perla da un giro y se coloca de espaldas, poniendo una expresión de negación. Granate y Amatista se preparan para la fusión)
Granate: (Sus gemas de las manos brillan) ¡Sincronizar! (Comienza a bailar)
(La danza de fusión de Amatista y Granate ya había empezado)
Steven: (Observa la danza, pero Perla le cubre sus ojos con las manos) ¿Pe-? Pero... ¡Perla! (Se quita un poco de los ojos las manos de Perla y mira entre los dedos de ella. Perla se sonroja) ¡Vamos, quiero verlo!
(Granate y Amatista continúan con la danza de fusión. Luego, ambas se fusionan, formando a Sugilita)
Sugilita: (Se coloca sus lentes) ¡Aih, jahah! (Se truena los nudillos) Olvidé lo bien que sienta ser yo misma.
Steven: (Mira a Sugilita sorprendido) ¿Esa es Sugilita?
Sugilita: ¡Ahí lo llevas, nene! Eh, Steven. ¿Quieres ver algo total?
Steven: ¡Síííí!
(Sugilita fusiona los guanteletes de Granate y el látigo de Amatista, formando su gran mayal)
Steven: (Asombrado) ¡Jaaaah!
Sugilita: ¿Te ha molado, peque?
Steven: ¿Vas a cargarte cosas con tu bola de demolición?
Sugilita: Ese es el plan. ¿Por dónde empiezo?
Steven: ¡Cárgate ese! (Sugilita gira fuertemente su mayal, destruyendo varios pilares)
(Caen varias rocas por encima de Perla y Steven. Ellos se cubren)
Perla: Steven, creo que debemos irnos.
Steven: ¿Qué dices? Esto es flipante.
(Sugilita continúa destruyendo los pilares del Centro de Comunicaciones. Varias rocas caen cerca de Perla y Steven)
Perla: ¡Cuidado! (Patea una gran roca que venía hacia ellos. Pero a Steven le cae encima una roca un poco más pequeña en la cara) ¡Steven! (Mira a Sugilita) ¡Uhg, eres demasiado!
Sugilita: (Deja de golpear los pilares) O quizá tú eres muy... poco. (Continúa destruyendo los pilares)
Perla: Steven, nos vamos. (Carga a Steven)
Steven: ¿Qué? ¡Estoy bien! ¿Qué pasa con Sugilita?
Perla: Ella puede volver sola.
Steven: Joh...
(Perla da un giro enojada. Y se retira teletransportándose del lugar. Luego, al portal en donde se teletransportaron le cae una gran roca, destrozándolo por completo)
(La escena cambia al Big Donut. Steven entra a la tienda utilizando unos lentes de sol, y un gran vendaje que cubre la mitad de su cabeza)
Steven: ¡Ehh!
Sadie: ¡Wow, Steven! ¿Qué te ha pasado?
Steven: (Se apoya en la mesa) Oh, unas heriditas de guerra de nuestra última misión. (Se quita sus lentes de sol y se los coloca en su franela)
Sadie: (Sorprendida) ¿En serio?
Lars: (Extrañado) A ver.
Steven: Me dio un pedrolo. (Levanta un poco su vendaje y señala un pequeño rasguño)
(Lars y Sadie se comienzan a reír de Steven)
Sadie: No creo que fuera un pedrolo muy grande.
(Steven se avergüenza y se sonroja)
Steven: Está... sangrando por dentro, ¡y mi dolor es interior! (Lars golpea la mesa y Steven se acuesta en ella)
(Lars y Sadie terminan de reírse)
Lars: No seas blandengue, Steven. (Steven lo observa, con tristeza)
Steven: Tienes razón... (Se quita todo el vendaje de la cabeza) Soy blando.
Lars: (Sostiene una lata de sardinas) Si no fuera tan modesto te enseñaría mi tableta de chocolate para que vieras como... (Se esfuerza en abrir la lata de sardinas) ...es un... (Continúa intentado abrir la lata) ...hombre de... (Sigue intentando abrir la lata) ...verdad. (No logra abrir la lata de sardinas. Sadie se ofrece para abrirla. Lars se rinde y se la entrega a Sadie)
(Sadie abre la lata de sardinas fácilmente, y se la entrega a Lars)
Lars: No voy a darte las gracias. (Sadie golpea la pierna de Lars y él se ríe)
Steven: (Emocionado) ¡Eso es! (Salta desde su asiento) ¡Necesitamos entrenamiento! ¡A por ello, entrenemos juntos! (Señala a Sadie. Lars se come un pedazo de las sardinas) ¡Tú podrás cascarle a Lars! (Luego señala a Lars, mientras él se come otro pedazo de las sardinas) ¡Y tu podrás encontrar una nueva churris si Sadie se divorcia!
Lars: (Con la boca llena) ¡No estamos casados!
Steven: (Emocionado) ¡Conozco a un tipo que nos puede ayudar!
(La cámara luego muestra a Greg dormido sobre una tabla de madera en la playa, al frente del templo)
Steven: ¡Wow, qué pasote! (Lars, Sadie y Steven miran el gimnasio de madera construido por Greg)
Greg: (Se despierta) ¿Uah? ¿Huh? (Se le cae la tabla que tenía en su cabeza)
Steven: ¡Hola papá!
Greg: (Steven camina hacia Greg) Steven, ¿te gusta? No he podido hacer más en tan poco tiempo.
(Lars y Sadie caminan hacia uno de los objetos que había creado Greg. Lars toma un palo de madera con unas latas de pinturas colgados a los extremos, los cuales se rompen al no poder resistir el peso de las latas)
Lars: ¿Bromeas?
Greg: Bueno, me gustaría apuntarme. Enseñaros un poco. Llevo escaqueándome del entrenamiento unas semanitas... meses... (Se entristece) años... (Se coloca su mano en la frente) (Tose) décadas...
Steven: ¡Claro! ¡Cuantos más peor! ¡Oh!, necesitamos cintas.
(Steven corre hacia el templo. Perla va llegando hasta el gimnasio)
Greg: ¡Hey Perla! ¿Quieres echarle un vistazo a estos musculitos?
Perla: (Mira a Greg extrañada) No. (Camina hacia el templo y se encuentra a Steven al frente de la Casa de Playa) Steven, ¿qué demonios estás haciendo?
Steven: ¡Montando un gimnasio! (Se flexiona) ¡Me pondré mega cachas! (Perla se ríe un poco) ¡Como Sugilita! (Perla se decepciona)
Perla: Oye... No creo que sea buena idea. (Steven se entristece)
Steven: ¿Qué? ¡Quiero ser fuerte para poder ayudar al equipo!
Perla: Pero hay muchas formas de ser fuerte...
Steven: ¡Pero yo quiero ser fuerte, pero de verdad! (Perla se sonroja, molesta) ¡Vamos Perla, musculicemonos! (Se coloca una cinta)
Perla: Prefiero que no. (Entra en la Casa de Playa)
(Se empieza a escuchar la música, Perla se recuesta en la puerta y se tapa la cara con sus manos. Luego ve el desorden de la ropa de Steven)
Perla: Steven... (Empieza cantar) No sé por qué tú deseas ser tan grande como esa mujer. (Recoge la ropa del suelo) Cuanto más grande es un poder más responsable has de ser. (Al levantar una de las camisetas de Steven, se caen los lentes de sol. Perla se asusta) Te hará daño, (Recuerda a Sugilita destruyendo los pilares del Centro de Comunicaciones) te va a dejar mal y por los suelos. (Va hacia la ventana para ver el gimnasio, y se pueden ver a Greg, Lars y Sadie entrenando) Lo digo por tu propio bien, no porque tenga... (Se interrumpe a sí misma, se sonroja y baja la persiana)
(Steven se encontraba acostado en el suelo, escuchando a Perla cantar. Él se agacha y observa por debajo de la persiana a Perla, la cual sigue cantando)
Perla: (Cantando) Voy a darte fuerza y valor, pero de verdad. (Toma la última camiseta de Steven que estaba en el suelo) Tú y yo juntos va a ser mejor, (Aprieta la camiseta) pero de verdad. (Extiende y dobla la camiseta, y la pone sobre la mesa) Porque yo te daré el valor, (Hace un paso de Ballet) soy tu motivación, tu inspiración y así serás mejor.
(Steven se va de la ventana, le sube a la música que tenía en su radio, y habla a través de un megáfono)
Steven: (Hablando por el megáfono) ¿Estáis listos para la caña? ¡No quiero veros llorar, quiero veros sudar! (Steven voltea a ver a Perla al frente de la Casa de Playa. Ella lo ignora y vuelve a entrar a la casa)
Steven: (Cantando y utiliza el megáfono) Voy a darte fuerza y valor, pero de verdad. Tú y yo juntos va a ser mejor, pero de verdad. (Le da una pesa a Greg, una cuerda de saltar a Sadie y señala a Lars)
Steven y Perla: (Cantando) Porque yo te daré el valor, (Steven ve a Sadie saltar la cuerda) soy tu motivación, tu inspiración y así serás mejor. (Steven ayuda a Lars a hacer flexiones y le señala a Greg la gran pesa para que la levante) Sí, yo te daré el valor, soy tu motivación, tu inspiración y así serás mejor. (Steven va corriendo y saltando mientras canta, viendo a todos hacer su entrenamiento. Él se para sobre Lars para darle peso extra a las flexiones)
(La canción termina cuando Greg, Lars y Sadie se cansan. Lars no resiste el peso de Steven y desiste, cayendo al suelo. Greg levanta la gran pesa, pero la tira al suelo. Sadie no resiste su posición y también termina desistiendo)
Sadie: Oye, Steven. ¿Y si tú también entrenas un poquito?
Steven: ¿Eh? Es que yo- (Lars lo interrumpe)
Lars: Mientras entrenamos, tú te dedicas a cantar tonterías.
Greg: Pero se te da muy bien meternos caña.
Steven: Gracias, pero yo también tengo que mazarme. ¡Me voy a castigar con cuatro neumáticos! (Se coloca encima los cuatro neumáticos y empieza a correr por la playa)
(Al día siguiente, la cámara muestra el amanecer. Luego muestra a Greg, Lars y a Sadie subiendo hacia la Casa de Playa)
Sadie: ¡Steven! ¡Vamos! ¡Estamos listos para empezar! (Se escucha desde lejos) ¡No podemos entrenar sin nuestro dictador favorito!
(La cámara va desde la puerta hasta llegar a la cama de Steven, donde él está recostado, adolorido por el entrenamiento)
Steven: (Gruñe adolorido) Denme un momento... ¡Uah uyhg! (Se cae de la cama y luego baja las escaleras mientras se queja del dolor) Tengo agujetas hasta en los ojos... (Intenta abrir la puerta, pero Perla lo detiene de hacerlo al hablarle)
Perla: No lo entiendo... Amatista y Granate aún no han vuelto. ¡He intentado localizarlas en el centro, pero está todo en ruinas!
(De repente, empieza a temblar y afuera Greg, Lars y Sadie se pregúntan por lo que está sucediendo)
Greg: ¿Qué ocurre?
Steven: ¿Huh?
(Vuelve a temblar)
Sadie: ¿Estáis viendo eso?
Greg: ¿Pero qué ha pasado?
(La casa empieza a desmoronarse y varios escombros empiezan a caer)
Steven y Perla: (Se agachan) ¡Huah!
(Perla sale de la Casa de Playa, seguida de Steven arrastrándose por el dolor. Se muestra a Sugilita llegando a través del océano, dando pasos, los cuales hacen que tiemble. Luego se muestra a Greg, Lars y a Sadie, asombrados por Sugilita)
Greg: (Asombrado) ¿Pero qué narices es eso? (Lars se cae de una barra del pasamanos que Greg había construido)
(Greg, Lars y Sadie corren mientras van gritando cuando Sugilita llega a la playa. Sugilita también grita fuertemente y enojada)
Sugilita: (Enojada y grita hacia el cielo con sus brazos extendidos) ¡UAAH, ME ABURRO!
Steven: ¡Es Sugilita!
Perla: (Se dirige hacia donde está Sugilita) Has vuelto.
Sugilita: (Enojada y señala a Perla con uno de sus brazos) ¡ME DEJASTE TIRADA!
Perla: (Intenta calmar a Sugilita) No pensamos que necesitarais ayuda. Anda, ¿por qué no os separais y así nos podemos relajar todos? (Le ofrece acomodarse en la Casa de Playa)
Sugilita: ¡No! (Patea a Perla. Haciéndola volar por el aire)
Steven: ¡Perla!
(Perla cae en el suelo)
Perla: (Enojada) ¡Escúchame! ¡La fusión está durando mucho! ¡Estaís perdiendo la cabeza!
Sugilita: ¡Soy yo misma! ¡Estoy harta de estar dividida! ¡Así que más te vale acostumbrarte a mí, nena! (Señala a Perla con dos de sus brazos) ¡Y quita esta basura de mi playa! (Aplasta y destruye completamente el gimnasio de madera de Greg)
(Steven va hacia Perla muy despacio, por el dolor de su entrenamiento)
Steven: ¿Por qué se está cargando el gimnasio? ¿Por qué te está atacando?
Perla: Steven, hijo. (Agarra a Steven por su camiseta) Anda, vete de aquí. (Arroja a Steven lejos del lugar)
Steven: (Grita y cae al suelo. Empieza temblar y no puede moverse por el dolor del entrenamiento) Estoy tieso...
(Perla invoca su lanza)
Sugilita: ¿Qué? ¿Quieres pelea?
Perla: ¡Me lo agradecerás después! (Da un salto hacia Sugilita)
(Sugilita la golpea con la mano, lanzándola por el aire)
Perla: ¡Ah!... (Desciende y cae al suelo fuertemente)
Greg: (Corre hacia Steven) ¡Vamos hijo! (Lo levanta un poco)
Steven: ¡Papá, no! ¡Perla!
(Perla se levanta, salta hacia Sugilita y la golpea con la lanza, quitándole los lentes. Greg y Steven las ven, sorprendidos)
Sugilita: (Enojada) (Perla se mantiene levitando en el aire) ¿¡Piensas que eres alguien!? ¡TÚ! (Golpea fuertemente a Perla con la cabeza. Perla aterriza en el suelo de pie) ¡NO ERES! (Golpea a Perla, enviándola muy alto por los aires) ¡NADA! (Salta y golpea a Perla en el aire. Perla se impacta contra el suelo)
(Sugilita invoca su Mayal y lo lanza contra Perla. Ella lo esquiva, pero el impacto hace que Greg y Steven salgan volando)
Steven: ¡Ah!... (Aterriza fuertemente en el suelo, al igual que Greg) Mis músculos...
Perla: (Se levanta temblando) ¡Steven! (No se puede mantener de pie y utiliza su lanza como apoyo. Comienza a llorar) Lo siento, Steven... (Sugilita salta y cae al frente de Perla, ella hala su mayal. Steven va por su megáfono) Granate... Amatista... No soy tan fuerte como... para protegeros... No soy lo bastante fuerte para nada...
Steven: (Hablando por el megáfono) ¡Vamos, Perla! ¡No te rindas! ¡Sé que tú puedes con todo!
Perla: (Cansada y triste) No puedo...
Steven (Hablando por el megáfono): ¡Sé que puedes! ¡Vamos, tú siempre sabes qué hacer! ¡Debes enseñarle a ella lo que me enseñaste a mí, que eres fuerte, Perla! ¡Pero fuerte de verdad!
(Perla se levanta. Ella mira el templo y gana confianza. Luego ve a Sugilita)
Sugilita: ¿¡Qué!? ¿¡Vienes a por más!?
Perla: (Confiada) ¡Por supuesto! ¡No eres rival para mí! ¡Ni de lejos!
(Sugilita manda un golpe contra Perla, pero ella lo esquiva. Perla corre hacia la montaña donde está construido el templo y Sugilita la persigue)
Steven: (Hablando por el megáfono) ¡DALE!
Sugilita: ¡Vuelve aquí!
(Perla llega hasta la cima de la montaña, y da un gran salto)
Sugilita: ¡JA, JA, JA! ¡Buen intento! (Gira su mayal para lanzárselo a Perla)
(Perla arroja su lanza contra la sima de la montaña en donde está Sugilita, lo que provoca que ella caiga hacia la playa)
Sugilita: (Se levanta) ¿¡Eso es todo!? ¿¡Crees que con eso puedes detene-!?
(A Sugilita le cae en la cabeza su mayal, provocando que se separen Granate y Amatista. Ambas terminan acostadas en la playa. Perla corre hacia donde están ellas)
Perla: ¡Amatista! ¡Granate! ¿Estáis bien?
Granate: (Agotada) Sí... Sugilita nos ha dejado para el arrastre... Es... Un poco doloroso.
Amatista: (Agotada) Y me duele mogollón el tarro...
(Perla llora mientras que las abraza a Granate y a Amatista fuertemente. A ellas les duele mucho, causando que ambas se quejen del dolor ocasionado por el abrazo)
Perla: ¡Oh!... (Perla las suelta al oír las quejas de Granate y Amatista) Ups.
Steven: ¡Perla, lo conseguiste!
Perla: (Se levanta y se quita las lágrimas de los ojos) Gracias, eres un gran entrenador.
Granate: (Adolorida) Perla... Deberíamos haberte escuchado. Tenías razón.
Perla: ¡Sí, tenía razón! (Steven mira a Perla felizmente, mientras que Greg, Lars y Sadie miran la escena, confundidos por lo sucedido)
Steven: (Hablando por el megáfono) ¡Vamos, Perla!
Perla: ¡Venga, estoy a tope! ¿Quién se apunta a una misión?
(Perla continúa hablando. Aparecen dos irises de las estrellas en las caras de Granate y Amatista)
Amatista: (Cansada) ¿Cuánto tiempo estará en este plan?
Granate: Resistiremos. Somos gemas.
(Aparece otro iris de la estrella en las caras de Sadie y Lars)
Lars: (Confundido) Ah... ¿Qué narices acaba de pasar?
(Aparece otro iris más, enfocándose en la cara de Steven, el cual está en los brazos de Greg)
Steven: (Hablando por el megáfono alegremente) ¡Calla y haz veinte flexiones! (El ruido causado por el megáfono hace que todos se estresen)